Afectaciones en zona de la costa salvadoreña evidencia condiciones de vulnerabilidad y refleja la necesidad de contar con una política de gestión integral de riesgos.

Mayo 5, 2015, nuevamente un fenómeno natural evidencia las condiciones de vulnerabilidad en las que se encuentra El Salvador, hasta el momento organizaciones que conforman la MPGR contabilizan 415 familias afectadas en las comunidades de Bola de Monte, El Tamarindo, Garita Palmera y Barra de Santiago, con daños en sus viviendas, perdidas de enceres, alimentos, intrusión salina en sus fuentes de abastecimiento.

Según el Ministerio de Medio Ambiente, el fenómeno es conocido como mar de fondo y provoca un oleaje más rápido y alto generado por tormentas extra tropicales en el Hemisferio Sur, en el país el fenómeno sucede cada tres meses pero no con la misma intensidad con la que se provocó el último, dicho incremento responde a nuevas condiciones derivadas del cambio climático, lo cual es un llamado de atención a tomar medidas inmediatas para enfrentar este y futuros eventos que junto a las condiciones de vulnerabilidad del país representan amenazas latentes para las y los salvadoreños.

Llama la atención que aun siendo un fenómeno recurrente, no existe un plan de respuesta ni de preparación ante el mismo, pese a que las autoridades señalan que responde al aumento de amenaza por cambio climático no se conocen hasta la fecha acciones de preparación para enfrentar dicho fenómeno.

Además, el mecanismo de cuantificar daños y pérdidas debe hacer eco en el llamado de crear una Política de Gestión Integral de Riesgos que señale lineamientos específicos para minimizar los daños que ocasionan las condiciones de vulnerabilidad en las que viven miles de familias en el país, la MPGR constantemente insiste en que es urgente cambiar la perspectiva emergencista con la que se abordan los desastres, recalcamos que los procesos de cambios necesitan coordinar e integrar esfuerzos públicos y privados, orientando procesos productivos, ambientales y de territorios, hacia la gestión integral del riesgo, para el mejoramiento de la calidad y seguridad vital de la población salvadoreña.

Por tanto Demandamos:

Al Ejecutivo que retome la discusión de la política de gestión integral de riesgos, que garantice la reducción y transformación de las causas generadoras de riesgos basados en la preparación de capacidades y condiciones para la prevención y manejo del riesgo, así como la organización y planeación participativa, diseño y operación de las alertas tempranas, primeros auxilios, sistemas de comunicación, evaluación de daños y de necesidades (EDAN), conocimiento de normas internacionales y otros.

Además es necesario que la Asamblea legislativa priorice la aprobación de las reformas a la Ley de Protección Civil, que deben ser vinculantes con la creación de la Política, que persiga la visión de contar con un territorio en transformación que garantice la sustentabilidad en toda su plenitud, propiciando la seguridad y vida de las personas, promoviendo sus derechos y la protección de sus medios de vida.

Mesa Permanente para la gestión de Riesgos en El Salvador.